La sopa de papalisa es un platillo tradicional boliviano, especialmente popular en las regiones andinas. Se trata de una deliciosa mezcla de carne, papalisa, arvejas y habas en un reconfortante caldo. Su preparación sencilla y ingredientes nutritivos la convierten en una opción perfecta para disfrutar en días fríos.
La sopa de papalisa es una celebración de la biodiversidad y las tradiciones agrícolas de los Andes. La papalisa ha sido cultivada y consumida por las comunidades andinas durante siglos, y su presencia en la dieta boliviana es un testimonio de la resiliencia y adaptación de estas comunidades a su entorno. La sopa de papalisa refleja la riqueza de la cocina boliviana, que sabe aprovechar los ingredientes nativos para crear platos nutritivos y deliciosos.
Ingredientes
½ kilogramo de Costilla de res
1 Pedazo de chalona
3 tazas de Papalisa cocida y machucada
3 cucharas de Aceite
½ taza de Habas
½ taza de Arvejas
1 Cebolla
2 Ramas de hierba buena
3 Papas
1 pizca de Sal
2 litros de Agua
Preparación
Paso 1 : En una olla, se pone los dos litros de agua y se lleva a ebullición.
Paso 2 : Una vez que el agua esté hirviendo, se añade la carne de res y la chalona, permitiendo que cocinen a fuego moderado.
Paso 3 : Mientras tanto, en una sartén se calienta un poco de aceite y se fríe la papalisa, luego se agregan las arvejas, las habas y la cebolla picada en juliana.
Paso 4 : La papalisa se incorpora al caldo donde se cuece la carne, permitiendo que cocine bien.
Paso 5 : Una vez que la papalisa esté cocida, se añaden las papas peladas y el resto de los ingredientes de la sartén al caldo.
Paso 6 : Se espera a que todo cocine adecuadamente antes de sazonar con sal y servir.
Paso 7 : Para decorar, se espolvorea hierba buena picada finamente encima del plato.