Uno de los preferidos por los bolivianos durante la conocida hora del té, es el Cuñapé. Tan sencillo y delicioso, como antiguo; del cual puedes saber más, si continúas leyendo este artículo.
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Un panecillo clásico de Bolivia: Cuñapé
Un panecillo clásico de Bolivia: Cuñapé

Descripción

Denominado como «cuñapé», se trata de un panecillo cuyo nombre proviene del Guaraní y se traduciría como «cuñá» como referencia a «mujer»,  y «pé», que es el equivalente a «chata», aunque investigadores señalan que podría originarse de la palabra «mbuyapé», que significa «pan». Por lo que no se cuenta con una interpretación única y propiamente dicha.

Este pequeño panecillo redondeado, está formado por entre queso y almidón de yuca mezclados con huevo, leche y sal. Pudiendo observarlo como acompañamiento para el café o el té, en países como Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador y Paraguay.

¿Qué se sabe sobre sus inicios?

Sus orígenes están más bien difusos, pues solo se cuenta con una teoría para explicarlos, la cual señala que a finales del siglo XVIII, Brasil se posicionó como el primer productor de harina de yuca, y con la misma, un esclavo formó lo que se considera el Cuñapé de los brasileros, el pão de queijo.

Y como sucedió con muchos otros platos durante la época de la colonia, hubo una variación de la receta cuando la misma llegó a Bolivia; dándoles su toque personal y modificando su nombre.

Curiosidades

Para prepararlo de forma más tradicional, se utilizan hornos de leña o barro; sin embargo, cada día han sido más las personas que se animan a cambiar esta costumbre, sustituyéndolos por  hornos eléctricos.

Respecto a los beneficios de su consumo, aporta distintas vitaminas de las cuales destacan las pertenecientes al complejo B: B1, B2, B3, B6 y B9, así como la K. Al igual que minerales como el cobre, fósforo, hierro, magnesio, potasio y zinc.