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Faltan apenas unas semanas para celebrar unas de las fiestas más esperadas del año, los Carnavales; y si su plan para ésta celebración es visitar la capital del folklore, Oruro, cuya fiesta destaca por la imponente entrada de bailarines agrupados en más de 50 comparsas y el recibimiento del alba con todo el cojunto de músicos cimbrando el aire con sus instrumentos, pues debería tomar en cuenta estas sugerencias gastronómicas para hacer de su visita a ésta majestuosa ciudad, una experiencia mucho más memorable.
¿Qué platos disfrutar en la capital del folklore?
¿Qué platos disfrutar en la capital del folklore?

Faltan apenas unas semanas para celebrar unas de las fiestas más esperadas del año, los Carnavales; y si su plan para ésta celebración es visitar la capital del folklore, Oruro, cuya fiesta destaca por la imponente entrada de bailarines agrupados en más de 50 comparsas y el recibimiento del alba con todo el cojunto de músicos cimbrando el aire con sus instrumentos, pues debería tomar en cuenta estas sugerencias gastronómicas para hacer de su visita a ésta majestuosa ciudad, una experiencia mucho más memorable. Aquí tiene algunos de los platos más solicitados de Oruro:

Charquecan.
Una combinación de mote (maíz), huevo hervido, queso frito y principalmente: charke (carna seca de llama). La porción servida es generalmente cuantiosa, debido a que para muchos es difícil quedar satisfechos con una sola ración gracias al sabor de esta exquisitez.

El Intendente.
Es una distinguida mezcla de todo tipo de carnes a la parrilla, no importa cual se imagine, de seguro la encontrará en este abundante plato.

Huatya o Pampacu.
Consiste en una variedad de carnes con diversos acompañamientos. Este plato posee un sabor único y sin comparación debido a su curiosa preparación, pues es la cocción es realizada bajo tierra. Un verdadero manjar, sin duda alguna.

Finalmente, no olvide conseguir su tradicional el api, una mezcla de mazamorra con canela, azucar y clavo de olor, podrá desgustarlo como buen desayuno en las primeras horas del día, junto a un buñuelo o pastel de queso.