Sin importar cuán amante sea uno de las cebollas, hasta llegar a incluirla en la llajua o como ingrediente principal en caldos, suele suceder que nos topamos con una cebolla de sabor muy fuerte, muy ácido. Las cebollas con sabor extra intenso son desagradables de comer, al menos para muchos.
La manera más fácil de solucionar el problema de las cebollas ácidas, es cortándolas en rodajas luego de dejarlas bien peladas. Inmediatamente, debe dejarlas macerar en una mezcla de aceite y jugo de limón puro, luego de unos veinte minutos, el sabor ácido concentrado habrá disminuido drásticamente. Otra alternativa es simplemente dejando correr agua caliente sobre las rodajas por un rato, pero esta opción no siempre suele ser efectiva, y quizás tome en cuenta hacer un uso más consciente del agua en su hogar.